Archive for septiembre 2005

¿Será verdad?

 

Tengo edad para recordar cuando una botella de 1 litro, era… una botella de 1 litro, quiero decir esa botella con el cuello fino que medía un palmo y era cilíndrica. Ahora miras en cualquier supermercado y encuentras por ejemplo una botella de champú de 700 c.c. que es más ancha y alta que la botella de 1 litro que recuerdo. Claro, los publicistas nos quieren hacer creer que nos dan más por menos, en definitiva es lo que todos queremos. Bueno, eso en el tema del supermercado, me parece un engaño digamos tolerable. En el tema de la salud también recuerdo muchos engaños pero el que más recuerdo es el del eslogan del ministerio de sanidad que decía: “si quieres a tu hijo, vacúnalo” ¿Quiere decir que si no lo vacuno, no quiero a mi hijo? Estoy en contra de la persona que pasa de la salud del hijo y no lo vacuna. Pero el padre que se informa de los efectos que puede tener la vacunación en su hijo, es posible que tome la iniciativa de no vacunarlo y usar otras alternativas, quizás un poco más complicadas para él y su hijo. Ese padre sí quiere a su hijo y quiere lo mejor para él. Hace unos días, “nuestra” ministra de salud, Elena Salgado, hizo que subieran las acciones de los laboratorios farmacéuticos, cuando anunció que todos debemos vacunarnos contra la gripe porque “viene el coco”, se acerca la gripe del pollo y es una cepa que parece que puede convertirse en una epidemia. Desde el año 1999 se está denunciando por varias asociaciones la presencia de Tiomersal, un derivado orgánico del mercurio, que se encuentra como conservante en algunos medicamentos entre ellos las vacunas. El calendario pediátrico de vacunación, puede exponer a un niño hasta a 7 vacunas con tiomersal desde su nacimiento hasta los 18 meses. Uno de los problemas más importantes de la intoxicación por metales pesados en este caso el mercurio, es que su toxicidad es acumulativa, esta confirmación es especialmente aplicable a las vacunas que contienen tiomersal, ya que su administración se realiza consecutivamente a un niño en pleno desarrollo neuronal. Una de las soluciones mas lógica es la de administrar otra vacuna indicada para la misma patología, pero que no contenga este conservante, pero para tomar esta acción los padres tienen que estar informados. Hace poco, fui a visitar al médico “del seguro” por un problema de salud y lo más interesante de esta visita fue que pedí información sobre la terapia, efectos secundarios, necesidad del fármaco, en definitiva, después de ser informado le dije el tratamiento que prefería y el médico se limitó a decirme cuales podrían ser los efectos de mi decisión y que yo me hacía responsable del tratamiento. Fantásticas palabras y llenas de verdad. El médico debería de ser el consejero y en última instancia somos nosotros los únicos responsables de nuestra salud. En muchos casos (documentados), no es la salud la prioridad del ministerio, sino que parece que tienen otros intereses más materialistas. Pida información siempre. El médico tiene la obligación de dársela y de común acuerdo seguir un tratamiento. No deje que le vendan botella de 700 c.c. como si fueran de 1 litro.

 

 

Manuel Ramos.

Tfn. de contacto: 629 56 17 47.

e-mail: manuel5351@terra.es

 

Más información:

En casi todas las provincias de España, existen asociaciones en contra de la vacunación y en Internet:

http://www.vacunacionlibre.org/manifest.htm

http://www.naturopolis.com/categoria.asp?idc=27792&numpagina=2

Dirección a favor de la vacunación:

http://www.viasalus.com/vs/B2C/cn/quieres_saber_mas/ESP/vacunas/est_c_quieres_saber_mas_falsas.jsp

Correo del valle 35

Los psicólogos, manejan una escala de evaluación del estrés llamada Escala de Holmes-Rahe, al puesto 38: cambio de carrera o colegio, se le asignan 15 puntos; Según esta escala, cuando se pasa de cierta cantidad de punto usted está estresado. Como todas las escalas, tiene la pega desde mi punto de vista, que nos miden a todos por igual. En esta escala, la jubilación produce 40 puntos de estrés, ¿cómo puede ser? Si según el diccionario, jubilación también significa júbilo. Es evidente que todos somos distintos. El artículo anterior abordamos el tema del final de las vacaciones. En éste hablaremos de la vuelta al colegio para los chicos y también algo que hacer para los mayores. En el colegio. Si puedes elegir el pupitre o lugar donde sentarte, puede ser la diferencia de enterarte de todo, o pensar que el maestro te está metiendo un rollo impresionante y pasar del tema. Para saber cual es el mejor sitio para sentarte (aparte de problemas auditivos o visuales), tienes que entender que nuestro cerebro se divide en dos mitades. Al izquierdo le damos las tareas lógicas y al hemisferio derecho las tareas emocionales. Primero tenemos que saber cual es nuestro hemisferio dominante. ¿Eres zurdo o diestro?, para saberlo fíjate con que mano aplaudes, es decir cual golpea a cual, ¿la izquierda sobre la derecha? ¿al revés?. Extiende tu brazo con el dedo índice levantado y con los dos ojos abiertos trata de “tapar” un punto lejos de ti, ¿ves dos dedos? no pasa nada, ni tienes nada en tu visión, es normal, ahora, sin mover el dedo, cierra un ojo alternativamente notarás que con un ojo “tapas” el punto y con el otro ves que el dedo está desplazado. El ojo que “tapa” el punto es el dominante. Si coincide que el ojo es el derecho, la mano que aplaude es la derecha y en definitiva eres diestro, tu hemisferio predominante es el izquierdo. Por lo tanto estás dentro de la mayoría de los occidentales “lógicos” en comparación con los orientales más “emocionales”. Bueno, esto, ¿para que sirve? Para que cuando te sientes en la clase de matemáticas (lógica) lo hagas a la izquierda de la pizarra. Si es una clase donde se debe usar la estética (plástica), te sientas de forma que la profesora o la pizarra quede a tu lado derecho. La cromoterapia también nos puede ayudar a aprovechar los estudios, por ejemplo, igual que en un restaurante ponen manteles y adornos amarillo, naranja, o rojo para estimular el apetito, en tu cuarto de estudio  te puede ayudar a concentrarte ciertos colores, que para cada persona puede ser distinto, pero que probando puedes encontrar el color que más te ayude a concentrarte. A un amigo estudiante le testamos los colores y para él, hacer los resúmenes de las lecciones era mejor hacerlo con bolígrafo de tinta negra. A otro le salió que recordaba mejor sus notas si usaba tinta verde y otro más, encontró mejor provecho si mantenía algunas pelotas u objetos rojos sobre su mesa de estudio. Una chica desde que quitó de su habitación un enorme póster, de una pantera que la miraba fijamente, pudo relajarse mejor y hacer mejor las tareas. Volvemos a mirar en el diccionario: habitación = hábitat: “Lugar de condiciones apropiadas para que viva un organismo, especie o comunidad animal o vegetal”. Saber que una pantera me está mirando continuamente, me haría sentir, como un pollo asado, por lo menos. El descanso regular es otro tema muy importante. Cada dos horas de estudio, necesitas quince minutos de relax, haciendo todo lo contrario de lo que estas haciendo, no sigas sentado delante de la tele o con un videojuego, sal y da tres saltos y te pones a cantar o coge el monopatín y te das una vuelta. Cuando regreses estarás más preparado para seguir estudiando. Para los mayores con trabajo de oficina, les sirve igualmente el tener un buen ambiente, también, tendrán mejor capacidad de trabajo si en vez de tomar un estimulante como el café, que al principio reanima pero después tiene el efecto de hundirte más, os “cepilláis” el cuerpo. Es decir uno se pone de pié, si es posible descalzo, mientras que un compañero pasa las manos por la espalda, desde la cabeza a los pies, como si estuviera cepillando el cuerpo, cuando las manos llegan al suelo, se toca éste, para descargar los malos rollos que uno va cogiendo. Hagan la prueba, no tienen nada que perder, sólo el cansancio.

Filosofía médica china

 

Cuando decíamos en el artículo anterior que la medicina convencional no busca curar las cusas sino sólo quitar los síntomas, quizás fue una afirmación demasiado general. Pero lo que no se puede negar es que la medicina convencional, mira demasiado a lo pequeño, busca un virus, una bacteria o ahora un fragmento de ADN que culpar de la enfermedad. Desde el punto de vista cientificista, no cabe duda de que es algo espectacular y extraordinariamente complejo. Quizás buscando la razón última de las cosas, nos perdemos de ver el conjunto del todo. Hoy necesitamos especialistas en cada rama de la salud, si tiene dolor de espalda, el especialista de la espalda le pueden mandar un calmante que le puede producir dolor de estómago, entonces tendrá que ir al especialista del estómago que quizás le mande algo para el estómago, que le puede producir insomnio, entonces tendrá que ir al especialista del sueño que le mandará otro medicamento. Seguramente de esta cadena de especialista quien más beneficio obtiene no será usted sino las multinacionales farmacéuticas, que curiosamente son las que más invierten en formar especialistas.

La ciencia ha demostrado que una gran cantidad de medicamentos naturales que usan los médicos chinos son placebo o cuanto menos, engaños que no sirven para nada. Pero, en cualquier hospital chino, el paciente lo primero que encuentra es un señor que mirándole el pulso, el olor corporal, el color y las marcas de la piel y la lengua, hace un diagnóstico global y holístico de la persona que le permite practicar una medicina barata y efectiva para los pacientes. Para ello le mandará un plan total de vida, que comer y como, cuanto descansar y trabajar, que medicamentos tomar y en definitiva estará tratando a la persona completa. Sus conocimientos están reglados de forma que el paciente recupere la salud “ganándosela” desde su esfuerzo personal, no “culpando” a un virus o “justificando” su enfermedad con una bacteria extraña y no poniendo sus esperanzas en un medicamento que parece que le viene bien a la “mayoría” de las personas. En occidente tenemos médicos que todavía hablan con sus pacientes y les pregunta no sólo por su salud sino también como le va la cosecha y si la vaca parió. Son los médicos rurales. Evidentemente, cuando la cosa se complica, tienen la “suerte” de mandar a su paciente a un hospital, pero, si trabajaran para no perder la salud y no para curar la enfermedad, pocos especialistas y hospitales harían falta. Por cierto, en la antigüedad, los médicos chinos cobraban mientras el paciente estaba sano, si enfermaba el paciente, tenía que curarlo gratis y si su paciente moría, le ponían un farol rojo en la puerta al médico. La prevención es el mejor método de salud. Suena a tópicos pero: una alimentación equilibrada donde se incluyan todos los grupos de alimentos. Reposo suficiente, donde dormir temprano y levantarse temprano puede dar vida. Reír cuanto se pueda, abrazar a todo el mundo, (no se corte, diga que practica la abrazoterapia), también llorar (¿porqué los hombres no lloran?), son pilares de prevención. Disfrutar del trabajo, darles suficiente amor y atención a los hijos y los amigos, bastarse con lo que uno tiene y tener una actitud positiva, sabiendo que no existen los problemas, porque cada uno de ellos nos da la oportunidad de crecer como persona. Si usted quiere practicar alguna disciplina como el yoga el Tai Chi o simplemente el salto del palo o la siesta, también se lo agradecerá su salud. Es decir, no hace falta ser chino para tener salud, los auaritas que vivían en armonía con la naturaleza, nos pusieron las pautas para vivir en esta maravillosa tierra.

 

                                                    Salud.

 

Manuel Ramos.

La Kinesiología Holística

 

En este correo hablamos de una técnica cuya esencia es la totalidad del paciente: su mente, cuerpo, energía, es decir, un tratamiento holístico: la kinesiología holística. ¿Cómo funciona?, la Kinesiología considera al ser humano desde un punto de vista trilateral, que conforma el triángulo del arte curativo en estructura, química y mentalidad, incluyendo en algunos casos la dimensión espiritual. El kinesiólogo se plantea que, ante cualquier alteración orgánica, desde un fallo glandular hasta una torcedura de tobillo, el cuerpo es capaz de "diagnosticar" ese fallo a través de unas estructuras conocidas desde antiguo, los propioceptores, que son pequeños corpúsculos nerviosos ampliamente extendidos a través de nuestro organismo. Hace más de cuarenta años, el Dr. Goodhearth, medía la fuerza de un músculo de un paciente, cuando encontró una relación entre la debilidad del músculo y la carencia de una vitamina. Después de administrarle dicha vitamina, comprobó la rápida recuperación del músculo. En los años 90, el terapeuta Raphael Van Hassen, comparando el largo de los brazos de un paciente, descubrió que cuando éste hablaba de un familiar con el que estaba enfadado, uno de los brazos se alargaba y cuando su conversación era sobre algo agradable, los brazos recuperaban su tamaño normal. Estos y otros descubrimientos conformaron lo que hoy es la kinesiología holística. Uno de los aspectos más destacables, es la falta total de efectos secundarios y la economía de uso. El kinesiólogo testará su salud comprobando su respuesta neuromuscular, no necesita aparatos carísmos ni análisis para comprobar si necesita una u otra vitamina o tratamiento, porque el propio cuerpo es el laboratorio. "La kinesiología aplicada -dice el Dr. Goodhearth- (descubridor de la técnica), se basa en el hecho de que el lenguaje del cuerpo nunca miente… La oportunidad de utilizar el cuerpo como un instrumento de análisis de laboratorio no tiene paralelo en la terapéutica moderna pues la respuesta del cuerpo no tiene errores”.  Desde entonces, la comprobación científica y práctica de ésta técnica goza, del reconocimiento de muchos profesionales de la salud que constantemente enriquecen la kinesiología con nuevas aportaciones. Si el cuerpo es capaz de hablar tan clara y directamente, ¿porqué no se usa más esta técnica?, en pocas palabras, porque no es rentable. Si usted se cura sólo con eliminar o incluir algunos alimentos normales, recitar algunas afirmaciones o aplicar normas higiénicas de vida, ¿cómo se venderán medicinas y tratamientos costosos? De todas formas, cuando acuda a su médico pídale que lo teste con kinesiología, se sorprenderá de la cantidad de profesionales que se interesan en su salud de una forma holística y no en enriquecer a multinacionales farmacéuticas. Otro punto que no debemos olvidar es que nuestro tratamiento, debe incluir nuestra forma de pensar, y usar la kinesiología para librarnos de fobias y manías, no tiene competencia. Una nueva técnica llamada EFT (Emotional Freedom Techniques) del doctor Gary Craig, está ayudando rápidamente a personas que quieren dejar de fumar, olvidar algún hecho traumático, superar miedo a conducir, a las arañas, ataques de asma e incluso fuertes dolores corporales sin necesidad de recurrir a medicamentos. Ésta técnica apoyada en la kinesiología es la última revolución en la recuperación de la salud, con un resultado de más del 75% de éxito. En una típica sesión de kinesiología, es probable que el terapeuta ni siquiera le pregunte por sus problemas, y no piense que es un brujo que sacará el tam-tam y las plumas para hacerle un ritual, la razón es que nadie sabe tanto sobre su salud como su propio cuerpo y el kinesiólogo sabe “dialogar” ese lenguaje corporal. Después de chequear las desarmonías de su salud, simplemente tocando puntos de su cuerpo, es el propio cuerpo el que determinará si es prioritario tratarlo y el como. En ocasiones es el propio cuerpo, el que le dirá en cuantos días mejorará y si podemos pasar a otro problema. Un buen kinesiólogo es el que se abstiene de diagnosticar y sólo se preocupa de ser un buen “canal” entre usted y su salud perdida. Recuerde, todos somos únicos, por eso nuestros tratamientos deberán ser únicos y sobre todo holístico.

 

 

Felices vacaciones con salud.

 

Manuel Ramos.

La vuelta de las vacaciones

La ciencia necesita etiquetar todas las cosas para poder manejarlas. Saben el chiste de la persona que va enfermo al hospital y después de múltiples pruebas, el medico habla con el paciente y le dice: Sr. Pérez, su enfermedad es muy difícil de curar, porque no hay estudios hechos sobre ella que nos pueda ayudar a curarle. El paciente inquieto pregunta y ¿qué enfermedad tengo?, a lo que responde el médico: pues la enfermedad de Pérez. Veamos algunas etiquetas: cuando una mujer da a luz, después puede tener la depresión posparto, cuando uno llega a los 40 años, la depresión de los cuarenta y cuando vuelve de vacaciones también se puede padecer el síndrome postvacacional. Si no ha tenido un hijo o tiene más de 40 años, lo que nos queda es que haya estado de vacaciones, entonces, ¿tendrá ese síndrome postvacacional? Los síntomas. Lo habitual es padecer a la vuelta de vacaciones un cuadro de debilidad generalizada, astenia e incluso pérdida de apetito. La capacidad de concentración se ve limitada así como la tolerancia al trabajo, que viene caracterizada como una sensación de desidia y hastío. Los más cercanos en el trabajo y en el hogar pueden sufrir las consecuencias. Un carácter agriado incluso violento puede introducir tensiones en nuestras relaciones con los demás.

La causa. La verdad es que en la mayoría de los casos, la culpa la tiene nuestro ritmo circadiano, ese reloj interno que no avisa cuando tenemos que comer, dormir o trabajar, que durante las vacaciones se altera con el horario que cambiamos con las nuevas actividades. También lo que comemos en ese periodo tiene su importancia, se abusa de los azúcares, las comidas grasas y las bebidas alcohólicas. Son sustancias que “envenenan” nuestro organismo y esto, lo obliga a prestar más atención y energía a limpiar esos tóxicos. Energía que nos falta y nos cuesta más movernos, y como nadie nos obliga, pues optamos por hacer largas siestas, caminamos menos o simplemente, nos tiramos en el sofá ante la televisión. En el periodo vacacional, nuestro reloj interno  se adapta a otros horarios nos levantamos tarde y nos acostamos más tarde y de pronto nos damos cuenta que nos quedan dos días para empezar de nuevo con la rutina diaria. ¿Qué podemos hacer? Generalizando, que es algo que no me gusta, les puedo decir que para evitar esa depresión en medicina natural se suele emplear ginseng y/o eleuterococo junto con otras plantas medicinales. Cuando tomemos conciencia de que estamos estresándonos deberíamos para cinco minutos, para hacer todo lo contrario de lo que hacemos. Si estamos estudiando o leyendo algunos informes, la relajación no es leer, aunque sean chistes no, tenemos que levantarnos de la silla y caminar rápidamente y salir fuera y mirar al mar o la montaña, dejarnos llevar por el encanto de la isla. A veces, se hace necesaria una pequeña ayuda, que nos la puede ofrecer la medicina natural a través de las plantas medicinales como es el hipérico, en dosis de 300 mg. dos veces al día. Las amas de casa suelen quejarse de la vuelta a la rutina, aunque, algunas se quejan de que han tenido que seguir haciendo la comida o arreglando el apartamento y por desgracia, parece que los “machos” no se quieren enterar que vivir en pareja, significa eso: parejo es decir los dos iguales. Un grupo especialmente sensible frente a la vuelta de las obligaciones es el de los estudiantes, que pueden sufrir episodios de estrés y angustia hasta que vuelven a coger los ritmos de estudio, madrugones y esfuerzo. En el próximo número daremos algunos consejos para que el curso empiece con buen ánimo, sólo con aplicar algunas técnicas fáciles.

 

 

Manuel Ramos.

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