Una vez leí sobre
uno de esos experimentos que se hacen sobre el comportamiento humano. En éste
caso se trataba de encontrar la relación entre la paciencia y el premio.
Se hizo pasar uno a uno a los alumnos
de una clase de primaria por una habitación, donde se le ofrecía un caramelo,
se le explicaba que se quedaría sólo y si podía esperar unos minutos sin
comérselo, al regresar la persona a la habitación, le traería uno más, pero si
se lo comía antes de éste regreso no conseguiría el segundo caramelo.
De esta prueba se hicieron dos grupos,
en un grupo los que habían tenido la paciencia de esperar por el
segundo caramelo y en el otro grupo los que se zamparon el caramelo en cuanto
se quedaron solo. A lo largo de su vida académica, se llevó nota de sus
progresos hasta que terminaron sus estudios y se constató, que el grupo de pacientes,
habían superado los estudios con mejor nota. Continuó el estudio ya en su vida
profesional y familiar y como pueden adivinar, los pacientes,
tenían mejores puestos de trabajo, menos divorcios, mejores vidas familiares y
menos problemas sociales.
Frases célebres.
Sobre la paciencia, una de la más
conocida es: “La paciencia es la madre de la ciencia”, otra “La paciencia y la
tolerancia es el camino a la tranquilidad y la paz interior”. Algunas frases
son una enseñanza en si misma: “La paciencia es uno de los mejores caminos para
alcanzar nuestros propósitos”, “El amor de tu vida no puede escogerse a cara o
cruz, la paciencia te llevará hacia él”, otras son críticas con el falso
paciente: “A veces la paciencia sólo es un reflejo de la vagancia o de la
ignorancia”, también tenemos referencias a la paciencia de parte de algunas
personas místicas como Teresa de Jesús: “Nada te turbe, Nada te espante, todo
se pasa. Dios no se muda. La paciencia todo lo alcanza. Quien a Dios tiene nada
le falta, solo Dios basta”, otras referencias a la paciencia son un poco
macabras: “Siéntate pacientemente junto al río, y verás pasar flotando el
cadáver de tu enemigo”.
La
paciencia “tibetana”
Si la
paciencia tiene una representación artística, en mi mente lo primero que
aparece es la imagen de Buda, sentadito meditando, con esa sonrisa de
iluminación y sobre todo: paciente. El año pasado asistí a unas charlas de un
monje que hablaba de la felicidad, éste año parece que seremos visitados por
algún otro. Si te interesa el tema, no pierdas de vista las fechas que se
anunciarán en la revista.
En un libro sobre esta enseñanza, se
presenta la siguiente analogía: Si
caminamos descalzos por el desierto, nos pincharemos con las espinas. Para
evitarlo, podemos cubrir todo el desierto o la tierra entera con cuero para no
pincharnos o, podemos poner cuero en la planta del pié. Las espinas representan
los enemigos externos, ¿Cómo vamos a acabar con todos ellos, si son infinitos
como la tierra? Es mucho más lógico cubrir la planta del pie, o sea, la
paciencia, controlar, trabajar con nuestra propia mente para que no sea dañada
por las espinas de los conflictos y problemas que tenemos en la vida.
Ya sabes, respira hondo y ten
paciencia. Salu2 Manuel